Plagas en el hogar, consecuencias y cómo enfrentarse a ellas

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¿Las plagas en el hogar se han convertido en tu peor pesadilla? No te preocupes, ¡todo tiene solución! Es más habitual de lo que crees encontrar diferentes tipos de plagas especialmente en viviendas ubicadas con jardines, la clave está en saber identificar el origen del problema y acabar con él para que no afecte a nuestro confort. Así que hoy desde Renovalia LifeStyle, especialistas en consejos para la salud del hogar, vamos a hablar de los tipos de plagas más comunes en las viviendas, qué consecuencias provocan y cómo pueden eliminarse definitivamente mediante algunas buenas prácticas en el día a día. ¡Toma nota!

Las plagas en el hogar más comunes y consecuencias

La presencia de plagas en el hogar puede desencadenar ciertas consecuencias en función del tipo de agente invasivo, aunque todas ellas tienen en común el hecho de afectar a nivel general la salubridad en el hogar, aspecto muy importante que en el día a día cada uno de nosotros debería luchar por mantener.

Las plagas más comunes en el hogar son sin duda la cucarachas, hormigas, moscas, mosquitos, piojos, pulgas, xilófagos y, entre ellas, la que suele más afectar a la salud del ser humano es la cucaracha, ya que puede transmitir enfermedades mediante un simple contacto con los alimentos y utensilios de cocina. Otras de las plagas más peligrosas y comunes son las del mosquito y las moscas, ya que también transportan en sus cuerpos múltiples bacterias y pueden transmitir enfermedades más o menos graves. Las moscas, al ser unos insectos voladores pueden hallarse en la basura y al momento entrar en contacto con los alimentos del hombre y los animales. Por otro lado, las pulgas son las plagas que afectan especialmente a los animales y se alimentan de su sangre, así como los piojos. Estos insectos se transmiten mediante contacto.

Los xilófagos destruyen estructuras y mobiliario de madera pudiendo causar daños económicos de gran valor y poniendo en riesgo la seguridad de toda la familia. Otros hematófagos como las chinches, pueden transmitir enfermedades muy dañinas, provocan ronchas y picor y algunos casos hasta fiebres. Y para terminar, las hormigas son las plagas que estamos más acostumbrados a ver en casa y viven en colonias. De hecho, cuando aparece una hormiga en la cocina es muy probable que se convierta en una plaga si no se detiene a tiempo.

Eso sí, detectar un solo individuo de estas especies que hemos mencionado, no quiere decir que se trate de una plaga, ya que para que esto se verifique, su presencia ha de ser mayor en número y en frecuencia de avistamiento.

¿Cómo nos enfrentamos a las plagas en el hogar?

La mejor manera de enfrentarse a las plagas en el hogar es evitar la colonización y para ello debemos tener en mente tres pautas básicas que resultarán muy efectivas:

  • Restricción de alimentos
  • Restricción de agua
  • Tapar las vías de acceso

Vamos a analizar todas y cada una de ellas para ver cómo llevarlas a cabo y combatir a los visitantes indeseados.

La cocina es sin duda el área con mayor poder de atracciones para los insectos de todo tipo y por ello debemos prestarle especial atención. Para evitar que sientan el deseo de entrar hay que evitar dejar zonas sucias con restos de alimentos o basuras sin tapar. Sin embargo, si es demasiado tarde y la plaga ya nos ha invadido, deberemos primero llevar a cabo una limpieza profunda y luego una desinfección general eliminando los insectos con desinfectantes activos como el vinagre o el cloro diluidos en agua, teniendo cuidado en proteger manos, ojos y vías respiratorias. Una vez hecho ésto, hay que preparar la cocina para prevenir otra futura invasión. ¿Cómo conseguirlo? Por ejemplo, podemos colocar los granos y las pastas secas en frascos de vidrio o de plástico de tapa hermética. También, deberíamos poner en contenedores herméticos o dentro de la nevera los dulces, mermeladas y otros alimentos similares, así como el azúcar que suele atraer las hormigas. Las semillas, harinas y los alimentos en polvo también atraen a las plagas. Mejor colocarlos en contenedores de vidrio o plástico de cierre hermético, o en bolsas de cierre total.Y, por supuesto, no hay que olvidarse de limpiar con cierta frecuencia tanto la despensa como la papelera. Aunque conservemos los alimentos en contenedores de vidrio o plástico con cierre hermético, cabe la posibilidad de que los insectos circulen por la zona. Una buena limpieza consiste en aspirar primero, desinfectar después, y ventilar y secar para terminar.

El agua es otro de los factores por los que se suelen establecer las plagas en el hogar. Pero éste es un aspecto más fácil de tener bajo control. Básicamente, hay que evitar que hayan rincones húmedos en la casa y vigilar las zonas menos accesibles en la vivienda asegurándose que no haya nunca acumulaciones de agua en el suelo, macetas, baño y otros lugares de la vivienda.

Por otro lado, si tapamos las posibles vías de acceso, estaremos impidiendo a los insectos de entrar a nuestro hogar. Es muy aconsejable el uso de ventanas y puertas mosquiteras, los faldones protectores en las puertas y la revisión periódica de techos, puntos de agua, puntos de luz y otros posibles accesos desde el exterior. Y por último, deberíamos revisar meticulosamente todas aquellas cajas que vengan del exterior antes de introducirlas en casa, ya que podrían ser fuente de plagas sin que lo sepamos.

Ahora, si una vez que hayas llevado a cabo estas medidas las plagas siguen allí, no dudes en contactar a una empresa especializada que pueda llevar a cabo una diagnosis más completa y pueda poner en marcha los procedimientos y protocolos enfocados a la eliminación definitiva de la plaga, procurando siempre preservar la seguridad de los habitantes de la vivienda. Combatir hormigas, cucarachas y otros insectos, tanto caminadores como voladores, es posible pero prevenir su llegada siempre es mejor.  ¡Pon en practica nuestros consejos y disfruta de un entorno saludable en tu propio hogar!