Si eres como la mayoría de la gente, seguro que ya has empezado a pensar en todas las cosas estupendas que puedes hacer en otoño. Desde Halloween hasta ir a recoger setas, o ir a dar un paseo, no faltan razones para salir al aire libre en estos meses. Sin embargo, hay una razón que a menudo pasa desapercibida: los beneficios de practicar deporte en otoño.

Y es que llega septiembre, se acaba el verano y parece que la operación bikini se termina. ¿Por qué? En este artículo te vamos a contar los beneficios de hacer deporte en otoño y te daremos una serie de consejos para que la lluvia y el frío no te paren estos meses.

5 Beneficios de practicar deporte en otoño: ¿Cuáles son?

Cada vez que llega la primavera comienza la moda de escuchar que debemos prepararnos para la operación bikini, es decir, perder esos kilos de más para lucir tipito cuando vayamos a la playa. Pero lo cierto, es que muy poca gente lo consigue.

Algo parecido pasa con el inicio del año, cuando es el uno de enero todo el mundo se apunta al gimnasio, pero después de pasados uno o dos meses mucha gente lo deja. ¿Cómo evitarlo?

A continuación, te damos 5 razones para hacer deporte en otoño y que la lluvia y el frío no sean una excusa.

Quemas más calorías, según qué deportes

Cuando el tiempo empieza a refrescar, a muchas personas les resulta más difícil salir a entrenar al aire libre. Sin embargo, el otoño ofrece una oportunidad única para disfrutar de temperaturas más frescas sin dejar de hacer ejercicio.

Esto se debe a que el tiempo de otoño suele ser más ventoso e imprevisible que el de verano. Esto significa que tendrás que esforzarse más para mantenerse caliente, lo que significa que tendrás que esforzarte más.

Muchos corredores y personas aman el otoño por estas razones. Pero deportes como el tenis, el pádel y el golf también se benefician de su práctica en otoño. El otoño es una época perfecta para estos deportes ya que el calor es más soportable que en verano

Las temperaturas más frescas hacen que los jugadores no se sobrecalienten tan rápidamente. Esto es perfecto para quemar más calorías y correr detrás de una pelota en una cancha de pádel.

Deporte al aire libre

La tercera ley de la termodinámica del Dr. William afirma que toda la energía se convierte en calor o se ve obligada a entrar en un estado de estancamiento. En otras palabras, nos vemos obligados a movernos o a ejercitarnos para mantener la temperatura del cuerpo.

Esto es especialmente cierto en otoño cuando comienza a refrescar y cuesta salir de casa. Y es que hay una diferencia fundamental entre hacer ejercicio en casa o el gimnasio y hacerlo al aire libre.

Al ejercitarse al aire libre, uno se ve obligado a realizar más actividad física, lo que significa que haremos un ejercicio de mayor calidad que resultará en un mayor consumo de calorías debido al frío del exterior.

Esto unido a la belleza del entorno natural puede proporcionar una distracción interesante y atractiva de cualquier entrenamiento.

Previene la aparición de la gripe, resfriados y enfermedades respiratorias

Pasar tiempo al aire libre ayuda a mantenernos más sanos al proporcionarnos un descanso de nuestra rutina habitual. Cuando uno pasa mucho tiempo encerrado en casa o en la oficina el organismo se aclimata a dicha temperatura y es más propenso a sufrir con los cambios bruscos de temperatura.

Por este motivo, la gente que hace deporte en otoño está acostumbrada a estos cambios de temperatura y su cuerpo es más tolerante al frío y al calor. Esto es especialmente útil para evitar ligeros resfriados e, incluso, retrasar la aparición de la gripe.

Asimismo, la gente que sale a pasear o hacer deporte en otoño  y disfruta del aire libre, está expuesta a la luz del sol y respira aire puro. Esto es muy importante para la gente que tiene problemas de asma y enfermedades respiratorias.

Además, la ciencia ha demostrado que los baños de bosque y los beneficios de practicar deporte en otoño ayudan a reducir el riesgo de muchas enfermedades potencialmente mortales, como las enfermedades cardíacas, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer de pulmón.

Por si fuera poco, un simple paseo al aire libre es beneficioso para el bienestar físico general, ya que aporta ventajas tanto a la mente como al cuerpo. En general, pasar tiempo al aire libre es una de las mejores maneras de mantenerse sano y de llevar un estilo de vida feliz y saludable.

Mejora la autoestima y la salud mental

Cuando se trata de alimentar la autoestima, no hay mejor opción que los deportes al aire libre y más si son en otoño. Un estudio reciente realizado por académicos de la Universidad de Essex reveló que las personas que participan en actividades al aire libre se sienten más seguras y menos ansiosas que sus compañeros.

Y la razón de este beneficio concreto es clara: la práctica de actividades al aire libre proporciona un modelo de cómo afrontar los retos de la vida. Y no pienses que tienes que correr 5 o 10 kilómetros, un simple paseo moderado de 20 a 40 minutos llega de sobra.

De hecho, ¿sabías qué los efectos positivos de caminar a un ritmo son casi similares a los de correr según qué distancia y tiempo? Por ejemplo, en cuanto a las enfermedades del corazón correr reduce el riesgo en torno a un 4,5 por ciento y caminar el doble con un 9,3 por ciento, según datos de la Fundación del Corazón.

Para esta asociación, lo ideal es pasear de 3 a 4 veces por semana con un tiempo de entre 45 minutos a 1 hora, aproximadamente.

Mejora los huesos y los músculos del cuerpo

La práctica de deportes como el tenis, el baloncesto o el fútbol, puede ayudar a fortalecer los huesos. Estos deportes implican moverse de forma rápida y agresiva y suponen cambiar de dirección rápidamente.

Estos tipos de ejercicio pueden ayudar a mejorar la fuerza muscular, lo que a su vez puede ayudar a prevenir lesiones y fortalecer los huesos. En general, cualquier movimiento adicional ayuda a romper la monotonía del cuerpo y fortalece los huesos y los músculos, lo que es especialmente importante a medida que se envejece.

Pero no sólo es útil para las personas mayores, también para los más pequeños. Hacer deporte en otoño tiene una serie de beneficios para los niños, tanto físicos como mentales.

En primer lugar, ser activo al aire libre ayuda a construir y mantener sanos los sistemas cardiovascular y respiratorio. Al correr o jugar al fútbol al aire libre, los niños aprovechan el aire fresco y el sol, que son vitales para su bienestar.

Además, estar al aire libre crea un entorno seguro y divertido en el que practicar deporte. No hay riesgo directo de lesiones, ya que el campo de juego es relativamente pequeño y está rodeado de árboles u otras estructuras.

El paso del tiempo y la llegada del frío es inevitable y como has podido comprobar los beneficios de practicar deporte en otoño son muchos. Así que, ¿por qué no tener en cuenta estos meses a la hora de planificar tu próximo entrenamiento? Con tantos beneficios increíbles, ¡seguro que será un éxito!

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